“He venido a por herramientas”
Tips del formador que se forma
La continua formación y el perpetuo reciclaje son características esenciales de los profesionales que nos dedicamos al desarrollo de las personas, equipos y organizaciones. Consultores, formadores, facilitadores, cualquier persona que ayude de manera profesional a los demás, debemos someternos a un aprendizaje constante y ejercer un progreso positivo en nuestras maneras de actuar. Sin embargo, nuestra profesionalización nos impide con frecuencia asimilar con toda su eficacia las enseñanzas que otros profesionales, expertos en sus materias, tratan de transmitirnos. Es el efecto “esto ya me lo sé” o “aquí he venido a por herramientas”.
Hace muchos años, yo mismo acudía uno tras otro a atesorar certificaciones, másteres o programas de especialización, con una intención clara de adquirir nuevas técnicas y pensando a su vez en las posibilidades de aplicación inmediata en las sesiones con mis clientes. Afortunadamente, comprendí de manera temprana que esta actitud proactiva y pragmática estaba jugando en mi contra. La cuestión era sencilla: simplemente había que dejarse llevar. Los poros de la piel abiertos dispuestos al disfrute y a impregnarse de experiencias, dejando a un lado determinadas expectativas que pueden limitarnos a la hora de recibir aprendizaje.
“Esto ya me lo sé”
Comienzan a hablarnos de algo que nos suena y ello activa un “click” que nos desconecta de la línea argumental del ponente. Por poner un ejemplo, en mis sesiones, sobre todo las que enseñan métodos basados en la introspección y en la escucha activa, es habitual comenzar realizando una pausa, mental y emocional, para cambiar del estado de rapidez en el que nos solemos situar todo el día, a un estado de concienciación que permita la receptividad. Siguiendo el método Points of You®, solemos hacerlo con una música y unas recomendaciones para lograr un reconocimiento de nuestro momento personal. Es en ese instante cuando el profesional “Yo he venido a por herramientas”, se pone a mirar el móvil o, si se trata de una sesión online, apaga la pantalla para aprovechar esos 5 o 6 minutos para finalizar alguna tarea tan importante como contestar un WhatsApp en un grupo, o mirar si ya le han hecho el ingreso que estaba esperando en su cuenta bancaria. Lo cierto es que, a la vuelta de la pausa, todos los participantes comparten cómo se sienten en este momento de inicio de sesión o responden a alguna pregunta que les hago para lograr la integración del grupo y así una mayor efectividad del workshop. Adivinen quién se queda desplazado/a, quedando fuera del efecto “cocoon” o envoltura del grupo…
Nuevos estilos
Por supuesto que los profesionales de la formación que llevamos un tiempo en esto sabemos mucho de nuestra especialidad y un poco, por qué no decirlo, de todo. Sin embargo, pensar que estamos perdiendo el tiempo cuando alguien nos explica algo que ya conocemos es un craso error. Por el contrario, es una ocasión magnífica para aprender nuevas maneras de comunicar ese conocimiento que suponemos que ya tenemos, quizá son ejemplos prácticos que demuestran la teoría, quizá es la manera de ordenarlos en la exposición… Es un buen momento para ver cómo otros hacen lo que nosotros ya sabemos.
El hecho diferencial de la formación Points of You
Siguiendo el hilo anterior, y si caemos en la distracción o incluso desprecio por estar asistiendo a una explicación que sentimos que ya conocemos, corremos el riesgo de no estar atentos a aprehender ese hecho diferencial, esa píldora de conocimiento incluida en dicha explicación que puede aportarnos gran valor o incluso un efecto “wow, esto le da mucho más sentido a lo que ya conocía”. Es la pepita de oro que nos perdemos por no tener la actitud inocente de “ojos frescos” ante el conocimiento, propio de una persona creativa.
“Esto lo dice por esto otro”
Somos tan listos que nos gusta presuponer, nuestra mente produce inferencias arbitrarias de lo que el otro nos está comunicando, y damos por sentado que nos va a llevar a un sitio conocido. Esto nos produce inquietud por sensación de perder el tiempo… Mientras estamos en ese desasosiego, no nos estamos dando cuenta que el ponente, el método o el ejercicio, nos está llevando a otro tipo de aprendizaje del que creíamos que íbamos a escuchar. Y nos lo perdemos por listos.
“He venido a por herramientas”, nos impide disfrutar de la formación, de vivir la experiencia en primera persona como luego se la vamos a entregar a nuestros clientes… “Yo ya me trabajo con mi terapeuta”, me impide sentir los procesos y mecanismos psicológicos que producen las propias herramientas y que nos permitirán no solo llevarnos un “paso a paso” sino algo más útil que un simple procedimiento… su manifestación en las emociones y conductas de los destinatarios finales de la misión formativa. Probablemente la clave del éxito de nuestro servicio, la distinción entre la manera de hacer de unos y otros profesionales.
Si solo vienes a por herramientas, no eres un candidato idóneo para ser facilitador Points of You.
Si lo que pretendes es absorber el conocimiento puro y vivir la experiencia como un viaje que te permita hacer viajar a tus clientes, entonces L2 Creative Practice Workshop es tu formación. Probablemente el workshop más profundo de Points of You.
Información L2 Creative Practice Workshop